Durante los últimos meses se ha acentuado un clima de descontento entre los productores agropecuarios de nuestro país que ven amenazado su futuro y su sobrevivencia, ante las complejas dificultades de un sector al que no le ha sido posible adaptarse a las realidades de un modelo económico basado en la apertura de los mercados y el libre comercio.
Para un país y un mercado pequeño como Panamá que, a lo largo de su historia, ha apuntalado su economía en el desarrollo de su sector comercial, logístico y de servicios, dejando rezagada la modernización de otras actividades económicas como el agro y la industria, resulta comprensible que, luego del avance que ha tenido en el tiempo la implementación de los Tratados de Libre Comercio, principalmente el celebrado con Estados Unidos, hoy se quieran endosar, casi exclusivamente, a estos acuerdos comerciales la causa de la inestabilidad y la incertidumbre que hoy se vive en el agro panameño.
La Asociación Panameña de Exportadores considera saludable que todos los sectores que estamos involucrados en la dinámica económica de nuestro país, hagamos un análisis objetivo y desapasionado de esta situación que desafortunadamente se presenta ante el país en medio de un escenario de crisis y de decadencia del agro panameño, cuando estamos muy a tiempo de emular el ejemplo de países vecinos que han logrado, a través de una sólida mancuerna Gobierno-Productores, potencializar su producción agropecuaria y expandirla a los mercados internacionales aprovechando los Tratados de Libre Comercio.
APEX no desconoce los retos que sabemos trae para los países pequeños como Panamá la apertura comercial y los Tratados de Libre Comercio, pero sin embargo consideramos que existe el espacio para que con la voluntad política que se requiere de nuestros gobernantes y el compromiso de los productores de modernizarse y hacer esfuerzos sostenidos para desarrollar la competitividad y eficiencia de nuestras actividades de producción, podamos convertir y sumar los acuerdos comerciales que ha suscrito Panamá con diferentes países, como herramientas para el desarrollo económico, social y humano del sector agropecuario panameño.
Para APEX es importante que el estado intensifique su apoyo al agro panameño, mediante iniciativas que verdaderamente impacten en la competitividad, eficiencia y productividad de las actividades de la producción primaria, garantía de la estabilidad y la paz social de este significativo sector de la economía panameña, lo mismo que se contemplen las inversiones que se requieran para fortalecer la institucionalidad y capacidad de respuesta de las instituciones públicas llamadas a convertirse en un real y efectivo soporte técnico para lograr el mejor uso posible de las nuevas tecnologías y buenas prácticas de producción que se traduzcan en un aumento en la innovación y en la incorporación de valor agregado para nuestra producción.
Por el lado de los Productores del agro, será necesario entender que ya estamos expuestos a la competencia internacional y que, por consiguiente, tenemos que propiciar una mayor asociatividad entre los productores panameños, para mejorar nuestras escalas de producción, al igual que alcanzar logros importantes en la calidad y diferenciación de nuestros productos e identificar los gustos, tendencias y patrones de consumo de cada uno de los mercados a los cuales podamos servir con mayores ventajas comparativas.
Esperamos que lo acontecido sirva para no seguir enfocándonos en nuestras limitaciones o debilidades, sino que veamos con optimismo la oportunidad de proyectar el sector agropecuario como una de las columnas más importantes de nuestra economía doméstica e internacional, ya que teniendo un agro fuerte, los Exportadores Panameños también tendremos la posibilidad de incrementar y expandir nuestra oferta exportable y continuar en la tendencia que hemos logrado revertir positivamente en los últimos meses al lograr un repunte de nuestras exportaciones, para satisfacción de todos los que conformamos la Asociación Panameña de Exportadores.
